la verba salvaje

de Otto Wald

vuelvo a volver

a mis bestias

cómanse el mundo
mis bestias queridas
entero y de un bocado

cómanlo con sus ojos salvajes
y con sus ideas dementes
cómanse el mundo suavemente

cómanlo con sus manos tiernas
    y sus deseos infinitos
con sus bocas de fuego 
    y sus mentes vibrantes
no dejen ni migas
    ni suerte
        ni horrores
            ni muerte

agiten sus melenas 
mis bestias queridas
y arrasen con todo lo que haya a su paso
no dejen ni escombros
ni dejen pasado
avancen brutales y hermosas
inclementes
avancen lado a lado

destrúyanlo todo
no hay nada que sirva
construyan lo suyo
inicien el fuego
inventen lo nuevo
no miren atrás
conviertan el juego
que arda en pedazos el pasado incierto
la luz del futuro no llora a los muertos

y vivan felices 
en tiempos mejores
cierren cicatrices
ahuyenten dolores
sean bestias buenas
sean bestias tiernas
que papi los mira
desde su caverna