la verba salvaje

de Otto Wald

vuelvo a volver

laringitis adoptada

eras joven guillotina
dictador de indicaciones
patinabas las edades
te acostabas margarina

con compromisos de seda
y negocios de escultor
surtías afirmaciones
pero se acabó el humor

hoy sos grifo de alerones
solo, chico y aburrido
con la costura babeada
y con el bate torcido

sufriste rueda de golpes
y sos hincha de linchar
garganta de sacerdote
(laringitis adoptada)
de vos ya no queda nada
sólo un tango que cantar