la verba salvaje

de Otto Wald

puta poesía

Luciérnagas eléctricas asesinas

de día se esconden
en la noche
miles de luciérnagas eléctricas
matan a los soles

los persiguen
los trituran
los desaparecen
en la noche oscura
mas oscura luego de la muerte

alumbran a los hombres
pequeños miserables
apagan el cielo
clarean de vicio la ciudad
violentas luciérnagas
resaltan lo horrible
artificios eléctricos
ensonmbrecen lo bello
pequeñas, diminutas
despojos de la técnica

destronan poderosos fuegos celestiales
los cansan
las luciérnagas eléctricas asesinas
los vencen
los envuelven en sombras
como agujeros negros devaluados
los condenan a la muerte del olvido
y la indiferencia